Porque teniendo el placer de participar en una conferencia on line sobre mamas emprendedoras, salió el tema de mi trabajo diario, y al acabar la conferencia me llego un correo, diciéndome que lo que yo hago lo podría volcar a mi negocio en casa, y así poder estar con mis hijos, sin tanto estrés y sin estar fuera de casa desde las 6 de la mañana hasta las 4 de la tarde.
Pero, sinceramente, pensé que no iba a ser capaz, el motivo, porque no recibía el apoyo de nadie de mí alrededor, me sentía con ganas pero sin apoyo, seguramente alguien habrá sentido esto.
Un día, al llegar a mi oficina, me dijeron que en Febrero, sintiéndolo mucho, tenía que dejar mi dependencia en Sevilla, que mi plaza real está en Cáceres. Una vez que llore, y di la noticia a mi pareja, fue él y la chica que tengo cuidando a mis hijos, la que me dijeron, ahora es tu momento, no dudes más. El simple hecho de despertar cada día sin ver a mis hijos, sin decir a mi pareja “buenos días mi amor” es algo que me hizo pensar seriamente que ellos tenían razón.
¿Qué podría perder? Tengo experiencia, pues es lo que llevo haciendo desde hace 10 años, me gusta estar en casa con mis hijos para atender sus necesidades e inquietudes y no preocuparme de que en Febrero no tenga sueldo estable para mis hijos.
Con lo que, como estáis viendo, me estoy haciendo hueco, teniendo el gran apoyo de mis compañeras del curso ¡Hazte experta! y sobre todo el apoyo que nos está brindando su creadora Mónica Álvarez.
